Youtuber Hildina vuelve a las redes sociales dos meses después de su arbitraria detención
Fecha de lanzamiento: 13 de mayo de 2023
La youtuber cubana Hilda Nuñez Díaz, conocida en redes sociales como Hildina, está de vuelta al espacio virtual luego de un silencio de dos meses, provocado por la confiscación de sus equipos de trabajo por parte de la Seguridad del Estado del régimen.
“Han pasado 2 largos y dificiles meses para mi desde mi detención. Por mi Seguridad y la de mi familia tuve que alejarme de todas mis Redes Sociales. Hoy gracias a Dios puedo decirles que estoy nuevamente de regreso con ustedes. Se que muchos estuvieron y han estado al pendiente de mi situación y quiero agradecerles a todos desde lo más profundo de mi corazón por su apoyo y por denunciar lo que me sucedió. Gracias a eso hoy puedo estar nuevamente aquí. Los quiero mucho y Dios me los Bendiga a todos”, dijo en su perfil de Facebook.
Esta nueva etapa de su labor, comenzó con la denuncia ciudadana de la situación en la que vive una familia santiaguera con varios hijos y ancianos, cuya casa se asienta sobre un deslave de tierra y esperan ayuda del gobierno desde el paso del ciclón Sandy, hace diez años. “Les presento a una familia que ha vivido en condiciones extremadamente precarias durante más de una década. Han sido víctimas de una promesa incumplida por parte del gobierno cubano, quien les aseguró una ayuda para reparar su vivienda tras un desastre natural, pero esa promesa se ha esfumado en el olvido”, escribió la youtuber, quien, además de donarles artículos de primera necesidad, apeló a la solidaridad de sus seguidores.
Profesora de la Universidad de Oriente, la creadora digital ha sufrido la represión del régimen por las denuncias que realiza en su canal de la plataforma Youtube, donde refleja la precariedad en que viven los cubanos, especialmente en la provincia de Santiago de Cuba, donde reside.
En diciembre pasado, autoridades de su centro de trabajo la citaron para una reunión rutinaria, a la que supuestamente acudirían varios de sus colegas. Conociendo las maniobras de intimidación del régimen, la joven procuró ponerse en contacto con varios compañeros, quienes aseguraron no tener noticias del supuesto encuentro.
Lamentablemente, sus sospechas eran ciertas y varios directivos de la universidad amenazaron con expulsarla de su puesto como docente, pues “no proyectaba el camino de la revolución”. “Me llamaron la atención a nivel de facultad, me quisieron dar un poco de miedo como que si seguía haciendo los videos iba a llegar a otros niveles, pero yo les dejé en claro que yo no sentía que estaba haciendo nada malo, yo estaba mostrando la realidad, no estaba diciendo mentiras y que si eso me iba a traer otras repercusiones lo iba a aceptar”, explicó la joven.
El 9 de marzo de 2021, una treintena de agentes de la Seguridad del Estado cubanas irrumpieron en la casa que Nuñez comparte con su esposo y su hijo. En el arbitrario registro, decomisaron los medios con los que la youtuber trabajaba, entre ellos su teléfono y computadora, para luego trasladarla a paradero desconocido por espacio de unas horas.
“Hildina todavía está sin teléfono u otro medio de comunicación o grabación. Se encuentra en su casa recuperándose de lo sucedido y está muy agradecida con todos por el apoyo que le han dado. Ahora mismo su Seguridad y la de su Hijo es lo más importante”, posteó alguien con acceso a su perfil oficial de Facebook.
Una fuerte campaña de solidaridad fue desplegada por sus seguidores. En su página web, un mensaje explicaba su situación a sus seguidores, y les pedía apoyo para desarticular la campaña de descrédito que la dictadura gestó en su contra en redes sociales. “COMPARTE con todos tus Familiares, Amigos, Youtubers, Influencers y Medios de Comunicación a tu alcance para que esos que quieren "Callar su Voz" sepan que Hildina no está Sola”.
El Observatorio de Libertad Académica manifiesta su solidaridad con la activista, a la vez que se congratula de que el hostigamiento del régimen no haya podido doblegar su voluntad de hacer pública la realidad cubana. A su vez, exigimos al régimen respeto a la integridad física y psicológica de Hilda Núñez Díaz y de su familia, dispuestos a denunciar cualquier arbitrariedad que contra ellos se cometa.